Ligero, elegante y con un toque cítrico que lo hace ideal para un picoteo o una cena donde no te quieres complicar mucho.
Sólo necesitas tener los ingredientes a mano y … ¡a la cocina! Ya verás como vuelves a repetir con esta receta.
Ingredientes para 4 personas
- 400 g de solomillo de ternera congelado (para cortar fino)
- Zumo de 2 limón
- Unas hojas de albahaca fresca
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal en escamas y pimienta negra
- Queso curado rallado (opcional)
Elaboración del carpaccio
1. Congela ligeramente el solomillo para facilitar el corte.
Con un cuchillo muy afilado, corta láminas lo más finas posible. Dispón las láminas sobre un plato grande, formando una capa uniforme.
En un bol pequeño, mezcla el zumo de limón, el aceite de oliva, sal, pimienta y albahaca picada finamente.
2. Riega el carpaccio con esta vinagreta
Y, si lo deseas, añade un poco de queso curado rallado por encima. ¡Ya verás qué sabor y qué armonía de exturas en tu boca!